Principales fiestas
Vive tradiciones únicas, música, arte, colores y momentos que solo Ledesma sabe regalar durante todo el año
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Semana Santa
La de Ledesma supone el típico ejemplo de la Semana Santa castellana, sobria y austera, pero llena de sentimiento y emoción contenida.
Tradicionalmente, la celebración comienza con el pregón, para continuar en los diferentes días de la semana con la realización de diversos actos religiosos y las procesiones. “La Borriquilla”, “Jesús en el Huerto de los Olivos”, “Jesús Flagelado”, “Jesús Nazareno”, “La Carrera”, “Nuestra Señora de la Soledad” son algunos ejemplos de las que recorren la Villa en esos momentos.
El Domingo de Pascua de Resurrección se realiza la procesión de “El Encuentro”. La Virgen va al encuentro de Jesús resucitado, coincidiendo ambas imágenes en la plaza mayor, donde los fieles despojan del luto a la Virgen para vestirla de nuevo con su manto blanco.
Fiesta del Corpus
Es la fiesta grande de Ledesma, que se desarrolla a lo largo de varios días, desde la víspera del jueves de Corpus hasta el lunes posterior, y su celebración suele caer entre los meses de mayo y junio.
Los principales actos comienzan el miércoles previo, con el pregón y la proclamación de la reina y las damas, seguidos al día siguiente de la Procesión del Santísimo por las calles del casco antiguo. El visitante que quiera conocer estas fiestas cuenta a lo largo de esa semana con numerosos festejos, siendo especialmente recomendado la asistencia a la romería del Prao de la Villa, desarrollada en la tarde del sábado, y a los afamados “Espantos”, celebrados en la mañana del domingo y el lunes, en las inmediaciones de la plaza de toros.
Fiesta de la Virgen del Carmen
Esta festividad se celebraba originariamente el cuarto domingo de octubre, pero a mediados del siglo XVIII pasó a celebrarse el domingo posterior al 16 de julio.
Diez días antes, se traslada la Virgen en procesión desde su ermita hasta la iglesia parroquial de Santa María La Mayor, donde permanece hasta el día de su fiesta para rezar la novena. Ese mismo día, el domingo posterior al 16 de julio, a la puesta del sol se devuelve en una procesión multitudinaria la imagen a su templo habitual, a donde peregrinarán los Mayordomos, ledesminos y todos aquellos que desean hacer alguna petición a la Virgen.
De regreso, tal como manda la tradición, se toma leche helada.
Calendas
En la noche del 23 al 24 de diciembre, las campanas de la iglesia de Santa María La Mayor, conocidas popularmente como campana gorda, campana chica, el esquilín y el porrón, eran volteadas a mano por voluntarios la víspera de Navidad. Esa noche, a partir de las dos de la madrugada, las campanas sonaban en intervalos de diez minutos de repique y diez minutos de silencio.
Las calendas fueron instituidas originariamente por los pastores de la zona que, para celebrar la Navidad, utilizaban para comunicarse con sus compañeros más alejados cualquier instrumento que tenían a su alcance.
Actualmente, el Ayuntamiento invita a las dos de la madrugada a mantecados, vino dulce y aguardiente a las personas que acuden a la plaza mayor para sumarse a la fiesta.