Comer

Descubre la gastronomía de Ledesma: carnes de raza autóctona, embutidos ibéricos, cocina tradicional y propuestas innovadoras. Restaurantes, casas de comidas y las emblemáticas rosquillas.

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Gastronomía de Ledesma

Para complementar la visita a Ledesma es necesario deleitarse con los platos típicos del lugar, enmarcados dentro de la gastronomía de la provincia, donde las carnes adquieren un protagonismo especial por su reconocida calidad, con razas autóctonas de la zona, como la morucha, y los embutidos procedentes del cerdo ibérico criado en la dehesa del entorno, el jamón “pata negra”, el farinato…

Sabores de Ledesma, tradición, calidad y autenticidad

La Villa ofrece un amplio abanico de posibilidades en cuanto a temas culinarios se refiere, desde los tradicionales guisos elaborados a la vieja usanza en los fogones de la casa de comidas que aún perdura, hasta la cocina más innovadora de los nuevos restaurantes, donde poder encontrar platos novedosos a gusto de los paladares más exigentes.

Y como postre, no se debe partir sin haber degustado sus afamadas rosquillas.

Restaurantes

Descubre los restaurantes de Ledesma, donde la cocina tradicional, los productos locales y los sabores auténticos se combinan para ofrecer una experiencia gastronómica única en un entorno histórico y acogedor.

Las Cadenas

Restaurante
“Las Cadenas” es un restaurante que, a pesar de los pocos años de su existencia, ha adquirido un merecido prestigio gracias al buen hacer y a la calidad de los productos empleados en sus fogones. Realiza una cocina tradicional, con toques modernos, basada en guisos, asados, carnes o pescados, así como platos de cuchara en temporada. En 2016 trasladó su ubicación al lugar ocupado anteriormente por uno de los hostales de mayor tradición de Ledesma –“La Beata”- que, al desaparecer, cedió su espacio a los nuevos aires que confiere “Las Cadenas” a la restauración ledesmina.
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Las Ventas

Restaurante
Unas viejas paneras de trigo, situadas en la zona del antiguo mercado, próximas al barrio de las Ventas, se convirtieron en 2007 en este espacioso y confortable restaurante. Ubicado en una de las entradas a Ledesma y adornado al estilo rústico, cuenta con dos comedores, el más pequeño ideal para reuniones o celebraciones privadas y el de mayor capacidad decorado con toques y detalles taurinos. En él se puede degustar la variada gastronomía de la tierra, principalmente carnes de la zona, guisadas o preparadas a la brasa, y embutidos ibéricos de gran calidad, además de diversos vinos, del territorio y diferentes denominaciones de origen.
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El Rocal

Restaurante
Ubicado en la misma plaza del mercado, lugar actual de mayor bullicio y trasiego de Ledesma, e incluido dentro del complejo turístico que supone este hotel rural, se encuentra el restaurante “El Rocal”. Cuenta con dos comedores, uno de ellos de gran capacidad y otro más pequeño que resulta perfecto para reuniones o celebraciones más reducidas y privadas. El edificio, de varias plantas, al haberse reformado en los últimos tiempos dispone de espacios amplios, pero acogedores a la vez, incluyendo en el sótano una sala de fiestas cuya estructura y decoración simula la plaza mayor de un pueblo.
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La Clerecía

Restaurante
Ubicado en la parte vieja de la Villa, “La Clerecía” es uno de los hoteles rurales que existen en la localidad que, además de contar con alojamiento, también dispone de restaurante donde degustar un tipo de cocina en la que se une tradición e innovación, combinando platos típicos de la zona con otros de diferentes países y culturas, además de poder disfrutar de una sobremesa al calor de la chimenea que posee en alguna de sus estancias. Este establecimiento se encuentra en una antigua clerecía y mantiene el estilo rústico característico de este tipo de edificios.
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La Fernandica

Casa de comidas
La Fernandica, situada en pleno barrio de Santa Elena, representa el ejemplo más claro de las antiguas casas de comidas que existieron tiempo atrás y que aún perviven en Ledesma. El nombre le viene de Fernando, el abuelo de las actuales propietarias, Ángeles y Tere, y supone una humilde taberna con ambiente familiar y acogedor en la que no solo se pueden degustar los guisos y productos más típicos de nuestra tierra, elaborados al estilo más tradicional, sino que se disfruta de la amabilidad y hospitalidad con las que atienden a todos los viajeros que se acercan a esta casa.
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Posada de Bleto

Restaurante
Este establecimiento, situado en el casco antiguo de Ledesma, junto a los jardines de la Fortaleza, se compone de un pequeño restaurante y de un alojamiento, aprovechando el lugar en el que antiguamente existió uno de los pocos bares que se encontraban en la parte vieja de la Villa. En él, con cercanía y sencillez, el responsable ofrece a las personas que hasta aquí se acercan platos para compartir –“platos al centro de la mesa”-, comida casera y vinos de la zona, con la finalidad principal de conquistar al cliente en base a la calidad de sus productos.
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Rosquillas de Ledesma

Dentro de la repostería ledesmina el producto por excelencia lo constituyen las rosquillas.

Aunque no se conoce con seguridad cuál fue su origen, hoy en día aún se recuerdan a las antiguas reposteras que las elaboraban: Regina y Dolores heredaron el oficio de su padre para hacer las famosas rosquillas en su confitería, próxima a la plaza mayor. Gabi y Herminia, siguiendo también la tradición familiar, las elaboraron durante años en su local de la calle San Miguel. A pesar de que las dos pastelerías hacían todo tipo de dulces, fueron las rosquillas las que mantuvieron su reconocimiento a lo largo de los años.

Ambas han derivado en los dos obradores existentes en la actualidad, en los que se admiten visitas y se realizan talleres participativos mediando cita previa.
Especialidades

Patatas “meneás”, sopas de ajo, Huevos con farinato, rabo de toro, Tabla de quesos.